Temple sobre tabla
Medidas 97 x 63,8 cm
Procedente del Retablo de Santa Marta, Santo Domingo y San Pedro Mártir de la capilla de Santa Marta de la catedral de Barcelona.
Procedencia:
Barcelona, colección Josep Genescà; Barcelona, colección Joan Ramon Campaner Noceras (1891); Englewood (Nueva Jersey, EUA), colección del Barón y la Baronesa Cassel Van Doorn (1950); Lloret de Mar (Girona), colección de Raül Roviralta y Astoul, Marqués de Roviralta de Santa Clotilde; Madrid, colección particular.
Nos hallamos ante un compartimento del disperso retablo de Santa Marta, Santo Domingo y San Pedro Mártir procedente de la capilla de Santa Marta de la catedral de Barcelona, una de las últimas obras realizadas por el pintor Lluís Borrassà y su fecundo taller de producción de retablos. Borrassà hoy es uno de los maestros emblemáticos de la pintura medieval en tierras hispanas y máximo representante del gótico internacional, el subestilo que hacia 1400 irrumpió en la Corona de Aragón procedente de las cortes europeas.
La obra que nos ocupa era sobradamente conocido por la historiografía y goza de un excelente pedigrí académico, con numerosas menciones en publicaciones que arrancan en 1950 con Chandler Rathfon Post, profesor de la Universidad de Harvard, que fue quien lo dio a conocer cuando se encontraba en una colección estadounidense (Englewood, Nueva Jersey).
Antes de emigrar a Estados Unidos la obra había pasado por diversas colecciones barcelonesas. Tenemos constancia de dos. La primera es la de Josep Genescà, uno de los primeros coleccionistas de pintura gótica documentados en tierras catalanas. Parece ser que durante los años cincuenta del siglo XIX Genescà adquirió diferentes tablas de dos retablos distintos procedentes de la catedral de Barcelona que habían sido pintados por Lluís Borrassà. Poco después, el conjunto de tablas reunido por dicho personaje aparecía en manos de otro coleccionista barcelonés pionero, el médico Joan Ramon Campaner Noceras (1812-1876). Los herederos de este último conservaron la colección hasta 1891, cuando fue vendida y dispersada.
Hay que suponer que en ese momento se inició el periplo que llevó a la tabla hasta Estados Unidos. En el momento de ser dada a conocer por Post se encontraba en manos de del Barón y la Baronesa Cassel Van Doorn en su residencia de Englewood (Nueva Jersey, EUA). El barón Jean- Germain Cassel Van Doorn (1882-1953) era un rico banquero belga que, junto a su mujer, Marij Vincentia Van Doorn, poseían elegantes residencias en Bruselas, París, Cannes y Nueva Jersey, todas ellas decoradas con un nutrido y selecto conjunto de obras de arte donde abundaban la pintura de old masters, el mueble francés y objetos de naturaleza diversa. La gran cantidad de obras acumuladas por el matrimonio hizo que a la muerte del barón sus colecciones se vendiesen en diferentes subastas, una en Bruselas (1953), otras siete en París (1954) y aún una más en Nueva York (1955).
Debió ser a raíz de dichas ventas que la tabla de Borrassà regresó a España, cuando debió ser adquirida por Raül Roviralta y Astoul (1891-1979), Marqués de Roviralta de Santa Clotilde, un importante industrial farmacéutico y filántropo que reunió una nutrida colección de obras de arte y barcos en miniatura en su residencia de Lloret de Mar, Santa Clotilde. La temática naval de dicha colección explica que adquiriera este compartimento de retablo de Borrassà, ya que domina la composición un barco del tipo coca cuya representación seguramente sedujo al coleccionista. El compartimento presenta una inscripción manuscrita en el engatillado posterior donde puede leerse “Este retablo el dejo a mi muerte a mis queridos hijos Alberto y [?]. Papa Roviralta. Santa Clotilde, 18 [?] 1981”. Hasta día de hoy el compartimento ha permanecido en manos de los herederos de don Raül.
(Extracto del estudio completo realizado por D. Alberto Velasco Gonzàlez, Universitat de Lleida disponible en la web de subastas Segre)